Los versículos 13 y 14 afirman lo bueno de la miel y la sabiduría, la relación entre ambas es ambigua. Si los dos dichos son distintos, entonces el primero enseña la riqueza de la miel de la naturaleza. Si los dos dichos son paralelos, entonces la sabiduría es como la miel, agradable y beneficiosa a largo plazo. El porvenir como producto de la sabiduría (del temor a Jehová) se encuentra aquí y en 23:18, respectivamente.
Los versículos 15 y 16 se dirigen al hombre impío. Como el ladrón, la mujer adúltera y la prostituta, el impío “acecha” la casa del justo o recto, actuando en una forma violenta (el espíritu de destruyas). Sin embargo, el versículo 16 sorprendentemente afirma cómo el justo es capaz de levantarse repetidamente (siete, muestra la totalidad o la manera completa de levantarse). Por otro lado, los impíos caen una sola vez.
Diez pasos para resolver los conflictos
1. A veces es mejor evitar el conflicto.
(1) Amar en vez de pelear
(2) Envolverse en una pelea es insensato
(3) Aislarse en vez de meterse en pelea
2. Es aconsejable buscar paz con Dios y los enemigos
3. Es necesario domar el temperamento
4. Es mejor resolver los conflictos en las etapas iniciales.
5. Hay que escuchar todas las facetas del problema.
6. Hay que buscar la objetividad.
7. Hay que calcular el costo del conflicto.
8. Hay que hacer el bien a aquel con el que tenemos conflicto.
9. Hay que evitar el conflicto ajeno.
10. Hay que disminuir la causa del conflicto.
12. El enemigo, el malvado y el inestable
Los versículos 17 y 18 son algunos de los versículos más interesantes de toda esta sección. Se trata la actitud del individuo hacia su enemigo (del vocablo que significa la enemistad o la hostilidad, como en 16:7, donde se espera la reconciliación). La actitud normal hacia la caída del enemigo es la alegría o el regocijo. Sin embargo, estos versículos muestran el temperamento divino, donde tal alegría no es apropiada. Aquí se ve el verdadero amor divino aun hacia los perdidos. Por lo tanto, se nota la intensa interacción divina con el enemigo y con el individuo al que se habla. No hay gozo en el corazón de Dios cuando se cumple un castigo. Por ende, el creyente no ha de tener gozo. Aquí se acentúa el amor universal y el compromiso absoluto de Dios hacia el hombre. Seguramente, a Jehová le agrada la reconciliación. Hay otros pasajes en el libro de Proverbios que tratan el tema del enemigo y la venganza.