Proverbios 24:12 Si dices: Mira, no sabíamos esto. ¿No lo tiene en cuenta el que sondea los corazones? ¿No lo sabe el que guarda tu alma? ¿No dará a cada hombre según su obra?
El compromiso con nuestra generación , Evangelización mundial. Sólo hay dos grupos de personas en el mundo: los que han escuchado el evangelio y aquellos que no. Si quienes lo han escuchado (y creído) rehúsan proclamarlo, Dios recompensará a cada uno «de acuerdo con sus obras». Somos responsables por nuestra generación. Aunque la gente a menudo debate en cuanto a la suerte de aquellos que murieron sin escuchar el evangelio, este pasaje revela la importancia de alcanzar a aquellos que están vivos aún. Una orientación práctica podría enseñarnos: David sirvió a su generación por la voluntad divina. No podemos retornar a la pasada generación, tampoco alcanzar la próxima, pero sí servir a ésta. La única generación por la cual Dios nos hace responsables es la nuestra.
Proverbios 24:13 Come miel, hijo mío, porque es buena; sí, la miel del panal es dulce a tu paladar.
Proverbios 24:14 Sabe que así es la sabiduría para tu alma; si la hallas, entonces habrá un futuro, y tu esperanza no será cortada.
Proverbios 24:15 No aceches, oh impío, la morada del justo, no destruyas su lugar de descanso;
Proverbios 24:16 porque el justo cae siete veces; y vuelve a levantarse, pero los impíos caerán en la desgracia.
Caer no es algo fatal, sino para el impío.
Proverbios 24:17 No te regocijes cuando caiga tu enemigo, y no se alegre tu corazón cuando tropiece;
Proverbios 24:18 no sea que el SEÑOR lo vea y le desagrade, y aparte de él su ira.
Puede que Dios vea nuestra alegría por los errores de otro como castigo suficiente para el pecador.
El rey David, padre de Salomón, se negó a mirar con satisfacción maligna la muerte de Saúl, su enemigo de toda la vida. Por otro lado, la nación de Edom se regocijó cuando derrotaron a Israel y Dios la castigó. Sentir satisfacción con la desdicha de otros es vengarse y colocarse en el papel de Dios, quien es el único Juez verdadero de toda la tierra
Proverbios 24:19 No te impacientes a causa de los malhechores, ni tengas envidia de los impíos,
Proverbios 24:20 porque no habrá futuro para el malo. La lámpara de los impíos será apagada.
Proverbios 24:21 Hijo mío, teme al SEÑOR y al rey, no te asocies con los que son inestables;
Proverbios 24:22 porque de repente se levantará su desgracia, y la destrucción que vendrá de ambos, ¿quién la sabe?
La rebelión contra Dios o contra un gobierno humano es cosa peligrosa.
Proverbios 24:23 También éstos son dichos de los sabios: Hacer acepción de personas en el juicio no es bueno.
Aquí aparece otra breve colección, parecida a la anterior, de proverbios de sabios.
Proverbios 24:24 Al que dice al impío: Justo eres, lo maldecirán los pueblos, lo aborrecerán las naciones;
Proverbios 24:25 mas los que lo reprenden tendrán felicidad, y sobre ellos vendrá abundante bendición.