Como ya hemos visto, Mateo tiene un esquema cuidadosamente preparado en su evangelio. En su relato del bautismo de Jesús nos Le muestra dándose cuenta de que ha sonado Su hora, de que Le ha llegado la llamada a la acción y que tiene que iniciar Su cruzada. En su relato de las tentaciones de Jesús nos Le presenta eligiendo deliberadamente el método que va a usar para llevar a cabo Su labor, y rechazando deliberadamente otros métodos que Él sabía que eran contrarios a la voluntad de Dios. Si uno asume una gran tarea necesita ayudantes, asistentes y personal; así es que Mateo pasa a mostrarnos a Jesús seleccionando los hombres que serán Sus colaboradores.
Pero si los ayudantes y asistentes han de hacer su trabajo inteligente y eficazmente habrá que empezar por instruirlos. Y aquí, en el Sermón del Monte, Mateo nos muestra a Jesús instruyendo a Sus discípulos en el Mensaje que era Suyo y que ellos habían de transmitir a la humanidad. En el relato de Lucas del Sermón del Monte esto aparece aún más claro. Sigue inmediatamente a lo que podríamos llamar la elección oficial de los Doce (Lucas 6:13ss) .Por esta razón, un gran investigador llamó al Sermón del Monte «El sermón de ordenación de los
Doce.» De la misma manera que hay que presentarle su tarea a un joven pastor que está a punto de encargarse de su primer trabajo; así Jesús les dirigió a los Doce este sermón de ordenación antes de que salieran a realizar su labor. Por esa razón otros investigadores le han dado al Sermón del Monte otros títulos. Se ha llamado < El compendio de la doctrina de Cristo,> < La Carta Magna del Reino,»< El manifiesto del Rey.> Todos están de acuerdo en que en el Sermón del Monte tenemos la esencia de la enseñanza de Jesús al círculo más íntimo de Sus seguidores.
EL SUMARIO DE LA FE
Es un hecho que esto es aún más verdad de lo que parece a primera vista. Hablamos del Sermón del Monte como si fuera un sermón determinado predicado en una sola ocasión. Pero es mucho más que eso. Hay buenas e indiscutibles razones para creer que el Sermón del Monte es mucho más queun sermón; que es, de hecho, una especie de epítome de todos los sermones que predicó Jesús.
(i) Cualquiera que lo oyera por primera vez en su forma actual estaría agotado mucho antes del final. Hay demasiado material es él para una sola audición. Una cosa es sentarse y leerlo, haciendo pausas o deteniéndose a pensar cuando se quiere, y otra escucharlo seguido por primera vez. Podemos leerlo a nuestro paso, reconociendo y saboreando cada palabra; pero oírlo por primera vez en su forma presente sería deslumbrarnos del exceso de luz mucho antes de que se terminara.
(ii) Hay algunas secciones del Sermón del Monte que surgen, por así decirlo, sin previo aviso; no tienen conexión con lo precedente ni con lo consiguiente. Por ejemplo: Mateo 5:31 s, y Mateo 7:7- I1están desconectadas de su contexto. Hay una cierta dislocación en el Sermón del Monte.
(iii) Lo más importante es que, tanto Mateo como Lucas nos dan una versión del Sermón del Monte. En la versión de Mateo hay 107 versículos. De estos 107, 29 se encuentran juntos en Lucas6:20-49; 47 no tienen paralelo en la versión de Lucas, y 34 se encuentran desperdigados por todo el evangelio de Lucas en diferentes contextos. Por ejemplo: el símil de la sal está en Mateo 5:13 y en Lucas 14:34s; el símil de la lámpara está en Mateo 5:15 y en Lucas 8:16; el dicho de que no se omitirá ni un punto ni una tilde de La ley está en Mateo 5:18 y en Lucas 16:17. Es decir, que pasajes que son consecutivos en el evangelio de Mateo aparecen en capítulos ampliamente separados del evangelio de Lucas. Para tomar otro ejemplo: el dicho acerca de la mota en el ojo de nuestro hermano y la viga en el nuestro está en Mateo 7:1-S y en Lucas 6:37-42; y el pasaje en que Jesús exhorta a pedir y buscar y encontrar está en Mateo 7:7-12 y en Lucas 11:9-13.
Si tabulamos estos pasajes lo vemos todavía más claro.
Mateo 5:13 = Lucas 14:34s
Mateo 5:15 = Lucas 8:16
Mateo 5:18 = Lucas 16:17
Mateo 7:1-5 = Lucas 6:37-42
Mateo 7:7- i2 = Lucas 11:9-13
Ahora bien: como ya hemos visto, Mateo es esencialmente el evangelio de la enseñanza; su característica es que recoge la enseñanza de Jesús bajo ciertos epígrafes importantes; y es mucho más probable que Mateo agrupara las enseñanzas de Jesús en un esquema general, que que Lucas tomara ese esquema y lo desmembrara, y dispersara sus piezas por todo su evangelio. El Sermón del Monte no es un sermón único que Jesús predicara en una ocasión determinada; es el sumario de Su enseñanza. Se ha sugerido que, después de escoger definitivamente a los Doce, puede que Jesús se retirara con ellos a algún lugar tranquilo durante una semana o más, y que durante ese tiempo les enseñara todo el tiempo; y el Sermón del Monte es la destilación de esa enseñanza.
LA INTRODUCCIÓN DE MATEO
De hecho, la frase introductoria de Mateo ya nos aclara esto considerablemente. Viendo las multitudes, Jesús subió a un monte; y Se sentaba, y Sus discípulos se Le acercaban, y Él abría Su boca y les enseñaba.