Malaquías 4: Dios enviará al profeta Elías

Con este libro de Malaquías, los profetas del AT llegan a un fin con un castigo severo sobre el pueblo por la inmoralidad evidente, por la infidelidad escéptica y por la adoración inadecuada al acercarse a Dios. Pero esta parte del canon llega también a un fin con una mirada distintiva hacia adelante, una esperanza en los actos futuros de Dios de poder y de bendición. Los sacerdotes eran culpables por despreciar al Dios que los amaba y los había redimido y al cual ellos servían. La gente había llegado a dudar de que Dios tenía algún significado en absoluto. De esta forma, se les advirtió: “Y luego, repentinamente, vendrá a su templo el Señor a quien buscáis…”. Aquel que vendría traería juicio sobre los que se habían apartado del Señor. Sin embargo, estaba la promesa de un libro delante de Dios, con los nombres de aquellos que eran fieles en su servicio al Señor. Juicio y esperanza, promesa y cumplimiento, gente pecadora y un Dios que se les enfrenta: sobre estas notas terminan los profetas del AT, habiendo preparado el camino para aquel que era el último mensaje de Dios a la humanidad.

Nuevamente Dios nos convoca; y a cada uno, en cada uno, y a través de cada uno, él quiere decirle al mundo entero: He aquí yo envío a mi mensajero….

    Páginas: 1 2 3

Ayúdanos a continuar Sembrando La Palabra de Dios

WebDedicado ha sido autorizado a recaudar las donaciones para continuar con La gran Comisión.


Deja el primer comentario