Nonás4:6 Y preparó Jehová Dios una calabacera, la cual creció sobre Jonás para que hiciese sombra sobre su cabeza, y le librase de su malestar; y Jonás se alegró grandemente por la calabacera.
Y preparó Jehová Dios una calabacera : Probablemente una planta que crece rápidamente y posee amplias hojas parecidas a la de la palma.
Nonás4:7 Pero al venir el alba del día siguiente, Dios preparó un gusano, el cual hirió la calabacera, y se secó.
Nonás4:8 Y aconteció que al salir el sol, preparó Dios un recio viento solano, y el sol hirió a Jonás en la cabeza, y se desmayaba, y deseaba la muerte, diciendo: Mejor sería para mí la muerte que la vida.
Nonás4:9 Entonces dijo Dios a Jonás: ¿Tanto te enojas por la calabacera? Y él respondió: Mucho me enojo, hasta la muerte.
Jonás se enojó porque la higuera se secó, pero no se hubiera enojado por lo que le hubiera sucedido a Nínive. Muchos de nosotros hemos llorado por la muerte de un animal doméstico o porque se nos ha roto un objeto de mucho valor sentimental. ¿Hemos llorado porque un amigo no conoce a Dios? Es más fácil ser sensibles a nuestros propios intereses que a la necesidad espiritual de las personas que nos rodean.
Nonás4:10 Y dijo Jehová: Tuviste tú lástima de la calabacera, en la cual no trabajaste, ni tú la hiciste crecer; que en espacio de una noche nació, y en espacio de otra noche pereció.
Jonás se apiada de una porción insignificante de la creación divina.
A veces la gente quisiera castigo y destrucción para las personas cuya perversidad parece merecer castigo inmediato. Pero Dios es más misericordioso de lo que nos imaginamos. Dios siente compasión por los pecadores que queremos que castigue, y busca la manera de que se acerquen a El. ¿Cuál es su actitud en cuanto a los perversos? ¿Quiere verlos destruidos? ¿O quiere que experimenten la misericordia y el perdón divino?
Nonás4:11 ¿Y no tendré yo piedad de Nínive, aquella gran ciudad donde hay más de ciento veinte mil personas que no saben discernir entre su mano derecha y su mano izquierda, y muchos animales?
La confusión de valores en la mente de Jonás se hace dolorosamente obvia. Dios lo desafía a considerar lo que valen los ninivitas. Que no saben discernir entre su mano derecha y su mano izquierda : Es un modismo que indica que los ninivitas, aun cuando no son moralmente inocentes, están indefensos y perplejos, sin saber cómo escapar del juicio divino. Sin un profeta, seguirían atrapados en su maldad.
Dios salvó a los marineros cuando imploraron misericordia. Dios salvó a Jonás cuando oró dentro del pez. Dios salvó a los ninivitas cuanto aceptaron el mensaje de Jonás. Dios contesta la oración de los que lo invocan. Siempre hace que se cumpla su voluntad, y desea que todos se vuelvan a El para salvarse. Una persona se salva cuando presta atención a las advertencias de Dios en la Biblia. Si reaccionamos con obediencia, Dios será bondadoso, y recibiremos su misericordia, no su castigo.
Milagros de Libro de Jonás
Dios envió una tormenta: 1.4
Dios mandó un gran pez que se tragara a Jonás: 1.17
Dios ordenó al pez que vomitara a Jonás: 2.10
Dios preparó una calabacera que diera sombra a Jonás: 4.6
Dios mandó un gusano que secó la calabacera: 4.7
Dios mandó un viento abrasador sobre Jonás: 4.8
Egoísmo. El disciplinar de dios