Isaías 54:7 Por un breve momento te abandoné, pero con gran compasión te recogeré.
Isaías 54:8 En un acceso de ira escondí mi rostro de ti por un momento, pero con misericordia eterna tendré compasión de ti –dice el Señor tu Redentor.
Dios dijo que abandonó a Israel por poco tiempo, por lo tanto, es como una joven esposa abandonada por su marido. Pero sigue llamando suyo a Israel. El Dios que servimos es santo y no tolera el pecado. Cuando Israel pecó flagrantemente, Dios en su ira decidió castigarlo. El pecado nos separa de Dios y nos trae dolor y sufrimiento. Pero si confesamos nuestro pecado y nos arrepentimos, Dios nos perdona. ¿Alguna vez ha estado separado de un ser querido y luego se goza cuando esa persona vuelve? Ese gozo es similar al que Dios siente cuando usted se arrepiente y regresa a El.
Isaías 54:9 Porque esto es para mí como en los días de Noé, cuando juré que las aguas de Noé nunca más inundarían la tierra; así he jurado que no me enojaré contra ti, ni te reprenderé.
Isaías 54:10 Porque los montes serán quitados y las colinas temblarán, pero mi misericordia no se apartará de ti, y el pacto de mi paz no será quebrantado –dice el Señor, que tiene compasión de ti.
Isaías 54:11 Oh afligida, azotada por la tempestad, sin consuelo, he aquí, yo asentaré tus piedras en antimonio, y tus cimientos en zafiros.
Isaías 54:12 Haré tus almenas de rubíes, tus puertas de cristal y todo tu muro de piedras preciosas.
Isaías 54:13 Todos tus hijos serán enseñados por el Señor, y grande será el bienestar de tus hijos.
Dios hizo una promesa a Noé que siempre guardó. Asimismo, Dios prometió a Israel que vendría el tiempo cuando dejaría de reprenderlo, lo restauraría a su riqueza anterior y personalmente les enseñaría a sus hijos.
Isaías 54:14 En justicia serás establecida. Estarás lejos de la opresión, pues no temerás, y del terror, pues no se acercará a ti.
Isaías 54:15 Si alguno te ataca ferozmente, no será de mi parte. Cualquiera que te ataque, por causa de ti caerá.
Isaías 54:16 He aquí, yo he creado al herrero que sopla las brasas en el fuego y saca una herramienta para su trabajo; yo he creado al devastador para destruir.
Isaías 54:17 Ningún arma forjada contra ti prosperará, y condenarás toda lengua que se alce contra ti en juicio. Esta es la herencia de los siervos del Señor, y su justificación viene de mí–declara el Señor.
Esta es la herencia : Aunque el pueblo de Jehová debía esperar la era por venir para la consumación de esta promesa, también se aplica ahora. Dios frustra las conspiraciones y acusaciones contra su pueblo.