La respuesta del profeta es igualmente entrecortada y difícil de entender. Lutero tradujo la palabra gam, como “aún”, y la formuló así: “La mañana viene, pero aún es de noche.” Es decir, a pesar de que parece ya ser tiempo de que amanezca y la opresión de los imperios llegue a su fin, la noche persiste para Edom. Y esta noche, como el nombre simbólico de Edom (Duma), que significa “silencio”, está sumida en el silencio profético. No hay para Edom respuesta de parte de Dios.
Finalmente, el profeta responde en un hebreo arameizado, como subrayando que está hablando con extranjeros y extraños, por lo cual recurre al arameo, el idioma internacional en los días de Isaías, en la parte occidental del imperio asirio: Im tibayún, beáyu; shúbu, eitáyu. Esto se podría traducir: “Si queréis seguir insistiendo en consultar, volved a venir, quizás el Señor revele algo nuevo para Edom”.
Se ha interpretado la persistente noche de Edom con la sucesión de los imperios asirio, babilónico, persa, romano, etc., que jamás dieron tregua a esta región. Para Edom jamás se manifestó de parte de Dios el mínimo resplandor de un rayo de esperanza, como para Judá. Sólo hubo el silencio, que desde ya equivalía al terrible juicio de muerte y ruina final para el pueblo de Edom. Bien podría esta profecía, así como la anterior, estar relacionada con el profetizado surgimiento del imperio medopersa, el cual sin duda vislumbró Isaías a la distancia. Isaías no podía sino esperar la mayor de las tragedias de aquella tierra al margen de la civilización, y a la cual llama en el versículo 1, tierra horrenda. Pero a su debido tiempo, los persas actuaron en la escena de la historia como el más civilizado de los imperios.
Edom
Edom era una antigua región de Asia que, según los relatos bíblicos, se extendía al sur del país de Moab. Sus habitantes idumeos o edomitas descendían de Esaú y eran nómadas. También se le llamaba tierra de Idumea y tierra de Seir. Esta región de Jordania, que se encuentra entre el mar Muerto y el mar Rojo, es una comarca montañosa. Hay una tradición musulmana que afirma que la tumba de Aarón se halla en esta región.
Verdades prácticas El atalaya de Dios
1. Averigua la revelación de Dios para el pueblo.
2. Discierne las condiciones existentes entre el pueblo.
3. Advierte de consecuencias del comportamiento pecaminoso en el pueblo.
4. Señala las verdades espirituales para el pueblo.
5. Interpreta los actos de Dios ante el pueblo.