Comprometidos a Sembrar La Palabra de Dios

Isaías 15: Profecía contra Moab

Isaías 15:1 Profecía contra Moab[a] Profecía sobre Moab. Ciertamente, de noche fue destruida Ar de Moab, puesta en silencio. Ciertamente, de noche fue destruida Kir[b] de Moab, reducida a silencio.

Profecía sobre Moab : Otro oráculo de juicio. Moab era un hijo de Lot concebido en una relación incestuosa de su padre con una hija. Los moabitas fueron constantemente una espina clavada en el costado de Israel. Su destrucción se debió al orgullo y al culto de falsos dioses . Nada se indica sobre quién destruyó a Moab o sobre cuándo ocurrió esto. Relatos extrabíblicos la atribuyen a una invasión en el 715 a.C. de una tribu nómada proveniente del este.

Ar era un importante distrito de Moab , y Kir su capital.

Moab estaba localizada al este del Mar Muerto. Los moabitas eran descendientes de Lot surgidos de su relación incestuosa con su hija mayor. Moab siempre fue enemiga de Israel. La oprimió e invadió su tierra, peleó en contra de Saúl y en contra de David. Moab recibiría el castigo por el trato duro que dio a Israel.

Isaías 15:2 Subió a Bayit y a Dibón,[c] lugares altos, a llorar; sobre Nebo y sobre Medeba aullará Moab; toda cabeza de ella será rapada y toda barba rasurada.[d]

El oráculo presenta una notable lista de ciudades moabitas al este del Mar Muerto, habitadas durante los 1.000 años de historia de Moab. Rapada . . . rasurada.

Isaías 15:3 Se vestirán de ropas ásperas[e] en sus calles; en sus terrados y en sus plazas aullarán todos, deshechos en llanto.[f]

Isaías 15:4 Hesbón y Eleale gritarán, hasta Jahaza se oirá su voz; por lo que aullarán los guerreros de Moab, se lamentará el alma de cada uno dentro de él.

Isaías 15:5 Mi corazón dará gritos por Moab; sus fugitivos huirán hasta Zoar, como novilla de tres años. Por la cuesta de Luhit subirán llorando y por el camino de Horonaim darán gritos de quebranto.

La misericordia de Dios, en oposición a su recto juicio, le hace lamentar el castigo de la pecaminosa Moab.

Isaías 15:6 Las aguas de Nimrim serán consumidas y se secará la hierba, se marchitarán los retoños y todo verdor perecerá.

Isaías 15:7 Por tanto, las riquezas que hayan adquirido y las que hayan reservado, serán llevadas al torrente de los sauces.

Isaías 15:8 Porque el llanto rodeó los límites de Moab; hasta Eglaim llegó su alarido y hasta Beer-elim su clamor.

Isaías 15:9 Las aguas de Dimón se llenarán de sangre, porque yo traeré sobre Dimón males mayores: leones para los que escapen de Moab y para los sobrevivientes de la tierra.

Moab

En cuanto a la fecha de esta profecía hay dos hipótesis:

(1) Habría sido pronunciada en los días de la guerra de Rezín rey de Siria y Pécaj rey de Israel contra Judá, en el mismo tiempo cuando Isaías profetizó también la ruina de Damasco. La razón para suponer esto se encuentra en 16:14: Dentro de tres años… será abatida la gloria de Moab, con toda su multitud. El agente de tal suerte sería Asiria. Con respecto a Damasco el profeta señaló un plazo de dos años a lo más. La ruina de Moab sería unos meses después, al tercer año, posiblemente en el año 732 según una inscripción de los días de Tiglatpileser. Sin embargo, entonces Moab no fue totalmente arruinada, sino solamente sometida a Asiria.

(2) Otros presuponen que la profecía habría sido pronunciada en el año 711, en los días de Ezequías, cuando se aliaron contra Asiria los pueblos de Moab, Amón, Edom, los filisteos y Judá, bajo la influencia de Egipto. Entonces vino el Tartán a Asdod, enviado por Sargón rey de Asiria.

En aquella ocasión Isaías también profetizó del destino que tocaría a Egipto, y en señal de duelo comenzó a andar desnudo y descalzo tres años, como un cautivo de los asirios. Algunos creen que la profecía anuncia dichos acontecimientos, aunque en una inscripción asiria del año 701 a. de J.C. también se menciona a Quemosnadab, rey de Moab, entre los reyes sometidos por Senaquerib.

La profecía comienza con la recitación de un antiguo poema que narra la devastación de Moab. El poema, que en su forma básica se remonta a los días de la destrucción de las ciudades de Moab por Sejón, rey de los amorreos, parece haber sido ampliado para incluir otros datos de la historia posterior de Moab, como los días de la conquista de Canaán por los israelitas, y los días del rey Mesa. La mayoría de las ciudades que se mencionan en 15:1-4, aparecen en la estela de Mesa, rey de Moab. También la mención de corderos en 16:1 parece aludir al tributo que los moabitas pagaban a Israel según 2 de Reyes 3:4.

A diferencia de otras profecías de Isaías contra los países limítrofes de Judá, esta profecía acerca de Moab expresa compasión por su destino: “Mi corazón da gritos por Moab“. En 16:11 dice: Mis entrañas gimen como un arpa por Moab…

El profeta vislumbra que los moabitas, a pesar de su larga historia de arrogancia y de hostilidad contra Judá e Israel, acudirían a buscar refugio en Judá, enviando allá como en el pasado un tributo de sumisión. La profecía presenta a los moabitas solicitando desesperadamente a los gobernantes en Jerusalén: “Esconde a los desterrados; no entregues a los que andan errantes… Sé para ellos refugio, a causa del destructor“. Pero en los círculos gobernantes de Judá no se creería a los mensajeros de Moab, ni se expresaría ninguna simpatía por su destino.

Profecías contra Moab Geografía: Moab se hallaba situado al sudeste y oriente con fronteras fijas: el río Zared, el desierto y el mar Muerto. En la zona norte la frontera variaba desde el Arnón hasta la terminación de la meseta un poco al norte de Hesbón.

Historia: Los moabitas eran descendientes de Lot, prole de su relación incestuosa con su hija mayor.

Los relatos arqueológicos existentes revelan que esta tierra estuvo poblada desde 6000 a. de J.C. La época de mayor civilización y cultura data de los años 2300-2000, cuando los pobladores eran los emitas; se dice que eran gentes de gran altura.

Los habitantes de Moab, como parientes de los israelitas, adquieren figuración con la persona de Rut, aquella mujer que en un arranque de lealtad filial a Noemí, decide regresar con ella a los campos de Judá. Ella tuvo participación en la fundación de la casa de David el famoso rey de Israel.

Las profecías lanzadas contra Moab por Isaías, se debían a los persistentes ataques que los habitantes de Judá recibían de éstos. Las fuerzas asirias dirigidas por Tiglatpileser, saquearon muchas de sus ciudades (734 a. de J.C.), Sargón (713 a. de J.C.), Senaquerib (701 a. de J.C.). Además Moab ayudó a Nabucodonosor contra Judá. En el 582, este rey devastó el territorio moabita, habiendo quedado desde esa fecha la tierra completamente devastada y desolada. Los descubrimientos arqueológicos dan testimonio de su antigua prosperidad.

Ayúdanos a continuar sembrando La Palbara de Dios

WebDedicado ha sido autorizado a recaudar los fondos para continuar con La Gran Comisión


Deja el primer comentario

Otros artículos de Nuestro Blog

Que pueden ser de interés para ti de acuerdo a tus lecturas previas.