El deuteronomista insiste en la necesidad de cumplir las ordenaciones del Sinaí (Horeb) y en las nuevas leyes promulgadas en Moab. Puede, pues, considerarse el versículo como conclusión general del conjunto legislativo y parenético del libro.
Declaración de bendiciones y maldiciones
Las bendiciones del pacto. Después de haber establecido el pacto con la nueva generación de israelitas, quienes estaban acampados en el valle de Moab, Moisés terminó su discurso con una proclamación de las bendiciones y maldiciones del pacto. La lista que aparece es una serie de maldiciones que vendrían sobre la persona que violaba el pacto.
La lista de bendiciones y maldiciones que aparece en este capítulo presenta con más detalle el resultado de la obediencia y las consecuencias de la violación del pacto.
El resultado de la obediencia.
La redención de Israel de Egipto y la elección de la nación para ser pueblo especial de Dios demandaban adherencia a la voluntad de Dios y a la manera de vida que Jehová describe en las leyes y decretos que él había dado a Israel. El Señor promete bendecir a Israel pero esta bendición demandaba la obediencia del pueblo. Si Israel escucha diligentemente la voz de Jehová y si pone por obra todos sus mandamientos, Jehová promete enaltecer la nación sobre todas las naciones de la tierra.
Las bendiciones específicas.
Las bendiciones del pacto pueden ser divididas en tres grupos: bendición de la tierra y personas, victoria contra los enemigos y la exaltación de Israel sobre sus enemigos.
Las bendiciones mencionadas en los reflejan la situación económica del pueblo. Por cuanto la base de la economía de Israel era la agricultura, las bendiciones son presentadas en forma de la abundancia de la cosecha y del rebaño. Si Israel obedece las leyes de Jehová, el pueblo será bendecido en la ciudad y en el campo. Por su obediencia a la palabra de Dios, Israel iba a experimentar la fertilidad de los hombres y mujeres, de la tierra y de los animales. La abundancia del campo se traduce en la abundancia de la canasta y en la abundancia de la comida. A la abundancia del campo será añadida la bendición de protección y seguridad de la comunidad.
Las promesas del Señor.
Esta sección elabora con más detalles las diez promesas de bendiciones. La promesa de protección y seguridad vendrá de tres maneras. Primeramente, en la victoria de Israel sobre sus enemigos. Jehová prometió que los enemigos de Israel serían derrotados. El uso del numero siete es simbólico, Esto significaba que la derrota de los enemigos sería completa. Segundo, la protección de Israel vendría en forma de poder económico: Tú darás prestado a muchas naciones, pero tú no pedirás prestado. Tercero, la seguridad de la nación vendría en forma de la exaltación de Israel sobre las naciones. Israel será cabeza, no cola.
La bendición del campo vendría en la abundancia de los graneros, en la fertilidad del campo, de los animales y en la concepción de hijos por las mujeres israelitas y en la certeza de abundante lluvias para regar el suelo.