Cantares 6:1 ¿A dónde se ha ido tu amado, hermosa entre las hermosas? ¿A dónde se ha dirigido? Ella ¡Iremos contigo a buscarlo!
Cantares 6:2 Mi amado ha ido a su jardín, a su jardín perfumado, a apacentar su rebaño y cortar las rosas.
Cantares 6:3 yo soy de mi amado, y él es mío. Él apacienta sus rebaños Él entre las rosas.
La joven dijo que ella y su amado se pertenecían el uno al otro, se entregaron mutuamente sin reservas. No importa cuán compatibles seamos con nuestros padres o nuestros mejores amigos, solo en el matrimonio existe una unión completa de mente, corazón y cuerpo.
Cantares 6:4 Tú, amor mío, eres hermosa y encantadora como las ciudades de Tirsá[1] y Jerusalén; irresistible como un ejército en marcha.
Esta feliz escena exalta el maravilloso poder real de la sulamita y da testimonio de su magnífica apariencia. Sus dos capitales, Tirsa (la primera de las capitales del reino del norte) y Jerusalén , manifiestan su amorosa majestad. Las reinas , concubinas y doncellas alaban a la sulamita porque ésta las representa.
Tirsa era una ciudad que estaba aproximadamente a 55 km al noreste de Jerusalén. Su nombre significa «placer» o «belleza». El rey Jeroboam convirtió a Tirsa en la primera capital del reino dividido del norte. «Imponente como ejércitos en orden» significa que la amada quizás tenía una presencia deslumbrante, como un gran ejército listo para la batalla.
Cantares 6:5 ¡Deja ya de mirarme, pues tus ojos me han vencido! Tus cabellos son como cabritos que retozan por los montes de Galaad.
Cantares 6:6 Tus dientes, todos perfectos, son cual rebaño de ovejas recién salidas del baño y listas para la trasquila.
Cantares 6:7 Tus mejillas son dos gajos de granada escondidos tras tu velo.
Cantares 6:8 Sesenta son las reinas, ochenta las concubinas y muchísimas las doncellas,
Salomón sí tuvo muchas reinas (esposas) y concubinas. La poligamia, aunque Dios no la apoyaba, era común en los días del Antiguo Testamento. Salomón dice que su amor por esta mujer no había disminuido desde la noche de bodas, aun cuando tenía muchas otras mujeres a su disposición.
Cantares 6:9 pero mi palomita virginal es una sola; una sola es la hija preferida de la mujer que la dio a luz. Al verla, las jóvenes la felicitan; reinas y concubinas la alaban.
Cantares 6:10 ¿Quién es esta que se asoma como el sol en la mañana? Es hermosa como la luna, radiante como el sol, ¡irresistible como un ejército en marcha!
Cantares 6:11 Fui al bosque de los nogales a admirar el verdor en el arroyo; quería ver los brotes de los viñedos y las flores de los granados.
Los carros de Aminadab : También se traduce como «los carros de la nobleza». Nadab puede referirse a personas nobles, generosas y tolerantes.