Muchas veces somos malagradecidos con las bendiciones que Dios nos ha dado. Nacimos sanos, sin ningún tipo de impedimentos. Otros han sido menos afortunados, pues han nacido con impedimentos increíbles y lo bien que han sabido manejar la situación. Y lo felices que son. Nos miramos sanos; y lo engreídos que muchas veces somos y tanto que se protesta y se le demanda a Dios.
Otras veces nos quejamos por algún tipo de situación que nos alcanza en un momento dado y se pone el grito en el cielo; sin mirar que hay otros agachados detrás de nosotros que están peor que tú y que yo. Seamos agradecidos por todas las bendiciones físicas, espirituales, materiales que Dios nos ha otorgado.
Al ver este mensaje tendrás que cambiar tu forma de pensar y ver las cosas de hoy en adelante y sobre todo ser más agradecido a Dios porque tienes todos los órganos del cuerpo bien para poder moverte en esta vida.
Si tienes la bendición de leer este mensaje, envíaselo a todos tus contactos, y ayúdanos a cambiar la forma de pensar de cada una de las personas que reciban este mensaje, y a que puedan amar sin esperar nada a cambio. Si lo hacen lograremos que este mundo sea mejor.