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2 de Samuel 7: Pacto de Dios con David

2 de Samuel 7:1 Aconteció que cuando ya el rey habitaba en una casa,[b] después que Jehová le había dado paz con todos sus enemigos de alrededor,

Su casa : El palacio construido por Hiram, el rey de Tiro.

Este capítulo registra el pacto que hizo Dios con David, prometiéndole que continuaría la línea de David para siempre. Esta promesa se vio cumplida en su totalidad con el nacimiento de Cristo Jesús. Si bien la palabra pacto no se establece específicamente aquí, se usa en cualquier otra parte para describir esta ocasión.

2 de Samuel 7:2 dijo el rey al profeta Natán:[c] –Mira ahora, yo habito en casa de cedro, mientras que el Arca de Dios está entre cortinas.

Esta es la primera vez que se menciona al profeta Natán. Dios se aseguró de que durante el reinado de cada uno de los reyes de Israel hubiera un profeta. Las obligaciones principales de un profeta eran las de exhortar al pueblo a seguir a Dios, y comunicar sus leyes y los planes para el rey. La mayoría de los reyes rechazaron a los profetas enviados por Dios. Pero Dios les dio la oportunidad de escuchar y obedecer. En los años anteriores, los jueces y los sacerdotes tenían el papel de profetas. Samuel sirvió como juez, sacerdote y profeta llenando el vacío entre el período de los jueces y la monarquía.

2 de Samuel 7:3 Natán respondió al rey: –Anda, y haz todo lo que está en tu corazón, porque Jehová está contigo.

2 de Samuel 7:4 Aconteció aquella noche, que vino palabra de Jehová a Natán, diciendo:[d]

2 de Samuel 7:5 «Ve y di a mi siervo David: “Así ha dicho Jehová: ¿Tú me has de edificar una casa en la que yo more?

En este mensaje de Natán, Dios dice que El no quería que David construyera una «casa» para El ¿Por qué no quería Dios que David construyera un templo para El? Dios dijo a David que su trabajo era unificar y guiar a Israel, y destruir a sus enemigos. Esta tarea requeriría que David derramara una gran cantidad de sangre. En 1 de Crónicas 28:3 se menciona que Dios no quería que un guerrero construyera su templo. Por lo tanto, David hizo planes y recolectó los materiales para que así su hijo Salomón pudiera comenzar a trabajar en el templo tan pronto como llegara a ser rey. David aceptó su papel en el plan de Dios y no trató de ir más allá. Algunas veces Dios le dice no a nuestros planes. Cuando eso ocurra debemos utilizar las otras oportunidades que El nos da.

2 de Samuel 7:6 Ciertamente no he habitado en casas desde el día en que saqué a los hijos de Israel de Egipto hasta hoy, sino que he peregrinado en una tienda que me servía de santuario.[e]

2 de Samuel 7:7 En todo cuanto he andado con todos los hijos de Israel, ¿he dicho acaso de alguna de las tribus de Israel, a quien haya mandado apacentar a mi pueblo de Israel: ‘¿Por qué no me habéis edificado una casa de cedro?’.[f]

Dios le recuerda a David su original propósito de llamarlo a apacentar el pueblo de Israel , no a construirle una casa.

2 de Samuel 7:8 Ahora, pues, dirás así a mi siervo David: ‘Así ha dicho Jehová de los ejércitos: Yo te tomé del redil, de detrás de las ovejas, para que fueras príncipe de mi pueblo Israel;

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