2 de Crónicas 4:11 Hiram hizo también calderos, y palas, y tazones; y acabó Hiram la obra que hacía al rey Salomón para la casa de Dios;
Los calderos, palas y tazones son instrumentos para la adoración que no nos son familiares. A pesar de que los artículos que utilizamos para servir en nuestra adoración han cambiado, el propósito de la adoración sigue siendo el mismo: honrar y alabar a Dios. Nunca debemos confundir nuestra adoración a Dios con aquellas cosas que utilizamos para adorarlo.
2 de Crónicas 4:12 Dos columnas, y los cordones, los capiteles sobre las cabezas de las dos columnas, y dos redes para cubrir las dos esferas de los capiteles que estaban encima de las columnas;
2 de Crónicas 4:13 Cuatrocientas granadas en las dos redes, dos hileras de granadas en cada red, para que cubriesen las dos esferas de los capiteles que estaban encima de las columnas.
2 de Crónicas 4:14 Hizo también las basas, sobre las cuales colocó las fuentes;
2 de Crónicas 4:15 Un mar, y los doce bueyes debajo de él:
2 de Crónicas 4:16 Y calderos, palas, y garfios; de bronce muy fino hizo todos sus enseres Hiram-abi al rey Salomón para la casa de Jehová.
2 de Crónicas 4:17 Y los fundió el rey en los llanos del Jordán, en tierra arcillosa, entre Sucot y Seredata.
2 de Crónicas 4:18 Y Salomón hizo todos estos enseres en número tan grande, que no pudo saberse el peso del bronce.
2 de Crónicas 4:19 Así hizo Salomón todos los utensilios para la casa de Dios, y el altar de oro, y las mesas sobre las cuales se ponían los panes de la proposición;
2 de Crónicas 4:20 Asimismo los candeleros y sus lámparas, de oro puro, para que las encendiesen delante del lugar santísimo conforme a la ordenanza.
2 de Crónicas 4:21 Las flores, lamparillas, y tenazas se hicieron de oro, de oro finísimo;
2 de Crónicas 4:22 También las despabiladeras, los lebrillos, las cucharas y los incensarios eran de oro puro. Y de oro también la entrada de la casa, sus puertas interiores para el lugar santísimo, y las puertas de la casa del templo.
Todos estos detalles acerca del templo demostraban el cuidado que Israel le daba a los actos de adoración. Además, servían como un manual para los lectores originales de 2 Crónicas, aquellos que construirían un templo nuevo en su sitio original después de que el templo de Salomón fue destruido por los babilonios.
El mobiliario, los atrios y los utensilios
Ya que 2 de Cronicas 4:1-11 se ocupa, en parte, de lo cubierto por su paralelo en 1 de Reyes 8:64 y 2 de Reyes 16:14-15, conviene recalcar aquí que el altar de bronce es un añadido de mayores dimensiones siguiendo el modelo de Exodo 27:1-8. La ausencia de este pasaje en 1 de Reyes podría significar que el editor supuso que el altar construido por Bezaleel para Moisés fue trasladado desde Gibón hasta Jerusalén. El altar de bronce fue el primer objeto descubierto en el atrio del templo, para indicar la idea de que el que se acerca a Dios lo hace solo mediante la muerte en sacrificio, sustitutoria y testamentaria de Cristo, según Hebreos 8:2-3; Hebreos 9:12.
La fuente de bronce fundido (versículo 2) indicaba la necesidad de limpieza espiritual a la cual alude Hebreos 9:10 al mencionar los «diversos lavamientos». Los rabinos creían que esta fuente contenía aprox. 66.000 litros de agua donde los sacerdotes se sumergían completamente. Es probable que la fuente de bronce simbolizara originalmente el triunfo de Jehová sobre el caos reinante antes de la creación. Estaba asentada sobre doce bueyes (versículo 3) orientados en grupos de tres mirando hacia los cuatro puntos cardinales, indicando que algún día los redimidos por la sangre del Cordero llegarían de todos los ángulos de la tierra para lavar sus pecados, y que en función del sacerdocio universal del creyente, ejercerían el ministerio limpios en esa fuente.