1Samuel 15:27 Samuel se volvió para irse, pero él se asió de la punta de su manto, y este se desgarró.
1Samuel 15:28 Entonces Samuel le dijo: –Jehová ha desgarrado hoy de ti el reino de Israel y lo ha dado a un prójimo tuyo mejor que tú.[o]
A un prójimo tuyo : No se refiere a una persona particular, sino simplemente a alguien con quien uno se asocia.
1Samuel 15:29 Además, el que es la Gloria de Israel no mentirá ni se arrepentirá, porque no es hombre para que se arrepienta.[p]
Ni se arrepentirá : Cambiar de opinión.
1Samuel 15:30 –Yo he pecado; pero te ruego que me honres delante de los ancianos de mi pueblo[q] y delante de Israel, y que vuelvas conmigo para que adore a Jehová, tu Dios –dijo Saúl.
Que me honres : Saúl está preocupado con su imagen, y mantener a Samuel a su lado lo haría aparecer bajo una luz favorable.
Saúl estaba más preocupado por el qué dirán que por el estado de sus relaciones con Dios. Le rogó a Samuel que lo acompañara a adorar como una demostración pública de que el profeta todavía lo apoyaba. Si Samuel le hubiera dicho que no, probablemente el pueblo hubiera perdido toda confianza en Saúl.
1Samuel 15:31 Volvió Samuel en compañía de Saúl, y adoró Saúl a Jehová.
1Samuel 15:32 Después dijo Samuel: «Traedme a Agag, rey de Amalec». Agag vino hacia él alegremente. Y decía:[r] «Ciertamente ya pasó la amargura de la muerte».
La amargura de la muerte : No habiendo sido ejecutado inmediatamente, Agag supone que se le ha perdonado.
1Samuel 15:33 Samuel dijo: «Como tu espada dejó a las mujeres sin hijos, así tu madre quedará privada de su hijo entre las mujeres». Entonces Samuel cortó en pedazos a Agag delante de Jehová en Gilgal.
Dejó a las mujeres sin hijos : Indica la crueldad de Agag y de los amalecitas.
1Samuel 15:34 Se fue luego Samuel a Ramá, y Saúl subió a su casa en Gabaa de Saúl.
Ramá y Gabaa estaban a sólo 16 km una de la otra, pero Samuel no iba a encontrarse con Saúl nunca más.
1Samuel 15:35 Nunca más vio Samuel a Saúl en toda su vida. Y lloraba Samuel por Saúl, porque Jehová se había arrepentido de haberlo hecho rey de Israel.
Aunque Saúl reinó cerca de 15 años más, fue depuesto por el Señor desde este momento.
El tercer fracaso de Saúl
La misión encomendada
Dios iba a castigar a los amalequitas por su oposición a Israel. El evento referido tiene lugar en Exodo 17:8, unos cuatro siglos antes. Podemos estar seguros que Dios está en contra “del reino pecador”. Los amalequitas según Genesis 36:12 descendieron de Esaú y aunque Esaú mismo hizo las paces con Jacob, sus descendientes no seguían su ejemplo. Por cuanto Amalec se levantó contra el pueblo de Dios, se había levantado contra el trono de Jehová y como dice Exodo 17:16, “Jehová tendría guerra con Amalec de generación en generación”.